Victoria ha registrado siete casos adicionales de coronavirus adquiridos localmente.
Cuatro de los nuevos casos son residentes en el tercer piso de los apartamentos Ariele en el barrio de Maribyrnong, que ha estado cerrado desde el lunes por la noche.
Entre ellos se encuentra un hombre de unos 60 años que posteriormente infectó a sus padres, que tienen más de 80 años y viven en el barrio de Craigieburn.
El hombre asistió a un partido de la AFL entre Carlton y Geelong el sábado y estaba sentado en el segundo piso del estadio MCC en Melbourne. También visitó el centro comercial Highpoint.
Unos 200 residentes de Ariele Apartments se vieron obligados a someterse a una cuarentena durante 14 días después de que un grupo de hombres realizó una mudanza para una familia de Nueva Gales del Sur mientras estaban infectados.
El trío, dos de los cuales dieron positivo, entregaron muebles a una familia en Craigieburn el mismo día, además de visitar varias estaciones de servicio y restaurantes de comida rápida, que han sido listados como sitios de exposición de primer nivel.
El caso nuevo es un hombre de unos 30 años que asistió a Coles Craigieburn el sábado al mismo tiempo que el miembro de una familia que regresó recientemente de Sídney mientras estaba infectado con COVID-19.
Las autoridades dijeron que tres miembros de la familia llegaron a Melbourne por avión el 4 de julio, mientras que un cuarto regresó el jueves.
La familia, que vive en la municipalidad de Hume, dio negativo poco después de su llegada, pero dos desarrollaron síntomas y se hicieron la prueba nuevamente el domingo, dando resultados positivos el lunes por la mañana.
Un tercer miembro de la familia dio positivo el martes, mientras que el cuarto dio positivo el miércoles.
Los siete nuevos casos se incluirán en las cifras diarias del jueves.
Mientras tanto, el primer ministro Scott Morrison anunció el martes un nuevo paquete de apoyo federal tras el brote de COVID-19 en Sídney que ha infectado a casi 700 personas y se ha cobrado la vida de dos.
El paquete será financiado conjuntamente por la Commonwealth y el Gobierno de NSW y se ofrecerá a otros estados y territorios si tienen que imponer cierres prolongados.
El paquete no fue recibido con entusiasmo por el Gobierno de Victoria, que solo recibió apoyo federal durante su cuarto confinamiento, después de presentar varias solicitudes de ayuda al Gobierno de Morrison.
"Los habitantes de Victoria están, con razón, hartos y cansados de tener que rogar por cada pedido de apoyo del Gobierno federal", dijo un portavoz de la oficina del premier Andrews en un comunicado el martes.
"No deberíamos tener una crisis en Sídney para que el primer ministro actúe, pero estamos viendo la hipocrecía una y otra vez. Su trabajo (Morrison) no es ser el primer ministro de Nueva Gales del Sur".
El tesorero Josh Frydenberg dijo al programa de las 7:30 de la ABC que la gente estaba "harta" de las "quejas y politiquería" del premier Daniel Andrews.
"A Victoria se le ofreció ayuda y decidió rechazarla. Ahora hemos implementado un sistema con NSW que puede extenderse y expandirse a otros estados en caso de que experimenten confinamientos prolongados", dijo.