La crisis de los incendios forestales afectó a tres de cada cuatro australianos de manera directa o indirecta, según una nueva encuesta de la Universidad Nacional Australiana (ANU, siglas en inglés).
La encuesta de la Universidad Nacional Australiana publicada el martes también reveló que el índice de aprobación del primer ministro Scott Morrison ha sido mellado desde la crisis.
Solamente un tercio de los australianos confía en el mandatario.
El investigador principal Nicholas Biddle dice que se sorprendió por la cantidad de australianos que fueron afectados indirectamente por los incendios.
"Esas medidas indirectas, en muchos sentidos, tuvieron un mayor efecto en las actitudes o creencias que un efecto directo solamente", dijo el profesor Biddle a la AAP.
El experto explicó que la disminución de la confianza en un corto período de tiempo significaba desafíos no sólo para el gobierno, sino también para el sistema político de Australia.
Sin embargo, el gobierno tiene mucho tiempo para recuperarse de los golpes propinados por los resultados de las encuestas antes de las próximas elecciones federales, recalcó Biddle.
"La cuestión será si eso volverá a ser un punto alto después de las elecciones, si se mantendrá en un nivel bajo o si estará en algún punto intermedio", expresó.
La encuesta estimó que más del 75% de los australianos se vieron afectados directa o indirectamente por los incendios.
Esto incluía al 14% estimado de los australianos afectados directamente por los bienes o perdidos, dañados o amenazados, o a los que se les aconsejó que evacuaran.
Entre los que no resultaron directamente afectados se encontraban personas que estuvieron expuestas al humo, se vieron obligadas a cambiar sus planes de viaje o se sintieron preocupadas por los incendios.
Mediante la encuesta realizada en enero pasado se le preguntó a más de 3,000 australianos qué pensaban de Morrison, lo que arrojó que se le calificó de forma negativa con un 3,92 de 10, por debajo del 5,25 de junio.
El gobierno también perdió votos, ya que el 35% de la gente dijo que votaría por la coalición en enero, en comparación con el 40% en octubre.
Sólo el 27% de los australianos dijeron que tenían confianza o mucha confianza en el gobierno.
Casi la mitad de los australianos creen ahora que las cuestiones ambientales son por lo menos las segundas más importantes para el país.
Las mujeres y los jóvenes eran los que más se preocupaban por el medio ambiente, y los que no vivían en las capitales eran los que menos se preocupaban.
A medida que las guerras climáticas internas del gobierno se avivan en torno al futuro de los combustibles fósiles en Australia, la encuesta reveló que alrededor de un tercio (37%) de los australianos apoyaban las nuevas minas de carbón, en comparación con casi la mitad (45,3%) en junio.
"La actitud de la gente vuelve no mucho tiempo después de la exposición a estos desastres nacionales, pero no siempre vuelve a los niveles anteriores a la exposición", dijo el profesor Biddle.
"La medida en que regresa parece estar influenciada por la discusión política o la respuesta política".