La exdirectora ejecutiva de Australia Post ha presentado pruebas contundentes durante una investigación del Senado, diciendo que la intimidación y humillación que sufrió la forzaron a renunciar.
Christine Holgate alega que el presidente de Australia Post la removió de su cargo ilegalmente, actuando bajo la dirección del primer ministro Scott Morrison, y defiende su controvertida decisión de comprar relojes de lujo para regalar a ejecutivos.
Como resultado, le han pedido al primer ministro que ofrezca una disculpa.
Puntos destacados:
- Christine Holgate abandonó su puesto como directora ejecutiva de Australia Post después de ser criticada por recompensar a varios ejecutivos con relojes de lujo.
- El primer ministro Scott Morrison ha sido acusado de intimidarla a raíz del escándalo que fue filtrado a los medios de comunicación.
- Holgate dijo que le escribió a varios políticos buscando ayuda y la ignoraron.
Durante una investigación del Senado, que duró casi tres horas, Christine Holgate afirmó que su deseo era aclarar los hechos que arruinaron su vida.
"Perdí mi trabajo, un trabajo que amaba, porque fui humillada por nuestro Primer Ministro por ser acusada de un delito, que no era un delito, y luego intimidada por mi presidente Lucio Di Bartolomeo, quien ilegalmente me removió del cargo bajo la dirección pública del Primer Ministro", dijo.
El 2 de noviembre del año pasado, Holgate dimitió de Australia Post después de que el primer ministro Scott Morrison la condenara en el parlamento por el escándalo causado por la compra de los relojes de lujo.
Perdí mi trabajo, un trabajo que amaba, porque fui humillada por nuestro Primer Ministro por ser acusada de un delito, que no era un delito, dijo Holgate.
Morrison pidió que Holgate se hiciera a un lado de inmediato o "se fuera", después de que una comisión de estimaciones financieras del Senado escuchara que cuatro ejecutivos con los cargos más altos en Australia Post recibieron relojes Cartier, comprados con la tarjeta de crédito corporativa de la compañía, como regalo por haber asegurado un acuerdo lucrativo.
Pero de acuerdo a los hallazgos de una investigación independiente realizada por la firma de abogados Maddocks que luego fue filtrada a los medios de comunicación, no se encontraron "indicios de deshonestidad, fraude, corrupción o uso indebido intencional de los fondos de Australia Post por parte de ninguna persona involucrada en los asuntos relacionados con la compra y obsequio de los relojes Cartier".
Hablando públicamente por primera vez desde que renunció, Holgate dijo a la investigación del Senado establecida para examinar las circunstancias de su partida y el escándalo de los relojes, que no renunció voluntariamente.
“La pura verdad es que me obligaron a renunciar.
“Fui humillada y empujada hacia la desesperación, me sacrificaron para que el presidente de Australia Post pudiera ganarse el apoyo de sus amos políticos.
“Pero sigo aquí. Y soy más fuerte por sobrevivir ", dijo.
Holgate dijo que contactó por correo electrónico a los ministros del gobierno, Simon Birmingham y Paul Fletcher, para pedirles ayuda, pero fue ignorada.
Agregó que la manera en la cual fue tratada en ese momento tuvo un grave impacto en su salud mental.

Former Australia Post CEO Christine Holgate appears before a Senate inquiry at Parliament House in Canberra on Tuesday. Source: AAP
"Creo que si leen el mensaje de correo electrónico que le envié a Simon Birmingham… [era un mensaje] incoherente porque yo estaba muy enferma, estaba tomando temazepam y tenía pensamientos suicidas".
La pura verdad es que me obligaron a renunciar.
Añadió ante la investigación que el hecho de ser mujer jugó un papel importante en la forma en la que fue tratada.
"Creo que es justo destacar que nunca he visto un comentario en un artículo publicado por los medios sobre el reloj de un político que fuera hombre.
“Sin embargo, fui representada como una prostituta por hacer esos comentarios, fui humillada.
“Nunca he visto a ningún funcionario público masculino representado de esa manera, entonces, ¿es esta una cuestión de género?, ciertamente lo es. ¿La intimidación, el acoso y el abuso de poder son los verdaderos problemas aquí?, por supuesto que sí”, afirmó
La oficina del Primer Ministro se ha negado a comentar sobre las acusaciones de Holgate.

لوچیو دی بارتولومئو، رییس هیأت مدیره آسترالیا پست Source: AAP
El presidente de Australia Post, Lucio Di Bartolomeo, quien también presentó pruebas en la comisión de investigación del Senado, negó que Holgate haya sido removida de su cargo ilegalmente, y dijo que ella misma tomó la decisión de manera voluntaria.
Dijo que la junta directiva le brindó amplio apoyo durante el calvario y culpó al "parlamento y los medios de comunicación" por haberle hecho la vida difícil.
Fui representada como una prostituta ... fui humillada, manifestó la exdirectora.
"No creo que Australia Post le deba una disculpa, pero sí creo que la trataron mal ... pero no fue una persecución para que abandone su trabajo", señaló Di Bartolomeo.
Australia Post ha anunciado que el ex jefe de la cadena de suministro de Woolworths, Paul Graham, será el nuevo director general de la organización.
Graham empieza el nuevo trabajo en septiembre con un salario anual de casi un millón y medio de dólares, más bonificaciones.
Holgate dijo en la investigación que Di Bartolomeo le prohibió divulgar los detalles de un informe preparado por la firma Boston Consulting Group sobre un plan para privatizar Australia Post y eliminar empleos.
No creo que Australia Post le deba una disculpa, pero sí creo que la trataron mal, señaló Di Bartolomeo.
Australia Post está obligada por ley a operar de manera comercial, pero utiliza sus propios activos y recursos para generar ganancias, que pueden reinvertirse en el negocio o devolverse como dividendos a su único accionista, el gobierno australiano.
El comité de investigación del Senado debe entregar su informe final el 30 de abril.