El gigante sudamericano se erigió como la tercera nación a nivel mundial con más casos de casos confirmados de coronavirus, protagonizando un vertiginoso aumento del contagio que deja en casi 18.000 los muertos, más de la mitad de los 32.233 decesos de América Latina y el Caribe.
Con las unidades de cuidados intensivos de los estados de Sao Pablo, Rio de Janeiro o Pernambuco (norte) cada vez más cerca del desborde, el presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro sigue adelante con su criticada campaña a favor de un desconfinamiento que ayude a salvar la mayor economía de América Latina, en momentos en que asoma una grave recesión.

A supporter of Brazil's President Jair Bolsonaro, holding a national, dances during a protest. Source: AP
Y mientras Brasil y el mundo batallan contra la pandemia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aceptó este martes iniciar una "evaluación independiente", cuando resuenan las acusaciones y amenazas de boicot lanzadas por Trump. Pero sin dejar de priorizar la lucha contra el virus, según el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
La Organización Panamericana de la Salud alertó sobre el impacto "desproporcionado" de la pandemia en indígenas y mujeres en las Américas, situándolos entre los grupos vulnerables que llamó a proteger para poner a la región "en camino de la recuperación".
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) también advirtió que los indígenas venezolanos que han cruzado las fronteras con los vecinos Brasil y Colombia se encuentran "expuestos peligrosamente" a la COVID-19.
En Perú, un motín desatado por temor al virus en una cárcel dejó 14 heridos. Una treintena de reclusos han muerto y más de 645 se han contagiado en las hacinadas cárceles peruanas.
Otras noticias en español:

OMS acepta investigación sobre su acción en pandemia