Guogang Tao solo informó a las autoridades de Nueva Zelanda que tenía dos hijos con su entonces esposa cuando solicitó la residencia neozelandesa hace 12 años, según informó recientemente la emisora Radio New Zealand.
En un proceso para luchar contra su deportación, este hombre de 72 años le dijo al Tribunal de Protección e Inmigración que donó esperma a Wanluan Xu, quien trabajó en su fábrica en China en el año 2000, pero que no le dijo de este hecho a su esposa.
Guogang y su esposa obtuvieron la residencia en 2007 para poder unirse a sus dos hijos en Nueva Zelanda, pero después la pareja se divorció cuando él confesó la paternidad de una niña en 2011.
Guogang había ido a China a ver a Wanluan nueve veces entre 2008 y 2015. Ellos además registraron su matrimonio en 2014.
Las autoridades neozelandesas emitieron una orden de deportación contra Guogang cuando su hija solicitó la residencia por no haber informado a las autoridades neozelandesas de su paternidad extramarital.
Las autoridades neozelandesas argumentaron en el caso que de haberlo sabido se habría investigado más su primer matrimonio, aunque los abogados del ciudadano chino defendían que la donación de esperma no es considerada legalmente como paternidad en Nueva Zelanda.
El Tribunal determinó que Guogang sabía de los resultados de ADN antes de que se termine su proceso para solicitar la residencia neozelandesa, aunque admitió que él no tuvo la intención de defraudar a las autoridades de inmigración.
“El Tribunal siente simpatía por el apelante, quien es una persona que sigue la ley y que su deseo natural fue y es vivir en Nueva Zelanda con sus dos hijos residentes neozelandeses y sus familias”, de acuerdo al fallo. “Sin embargo, el apelante estaba obligado a informar a Inmigración Nueva Zelanda de cualquier hecho relevante o cambio de circunstancias que pudiera afectar la decisión en su solicitud de residencia y no informó a Inmigración Nueva Zelanda del análisis de ADN que muestra que estaba genéticamente relacionado a un niño no declarado en esta solicitud, y su intención de sumarla al registro de hogares en China” “Como resultado, el apelante no proporcionó a Inmigración Nueva Zelanda de la oportunidad de realizar una evaluación completa de su solicitud y tomar una decisión basada en sus circunstancias reales”.
El Tribunal ordenó su deportación, aunque eliminó el período de prohibición de entrada a Nueva Zelanda para que el hombre pueda visitar a su familia.
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